Ser las responsables de la Guerra Civil, el Capitalismo, las burbujas inmobiliarias... no es nada comparado con la destrucción de los habitats del planeta.
Seré breve, estaba ayer comprando ensaladas y vi como en el supermercado las bolsas de plástico con ensalada cortada superaban a las lechugas enteras que ya te cortas tu en casa, y me pregunte... ¿Por que en Occidente estamos plastificando cada unidad de comida?, obviamente no tenemos tiempo que perder, del trabajo al super, del super a casa, descanso y ocio... NO TENEMOS TIEMPO PARA PLANIFICAR EL HOGAR.
Antiguamente las mujeres podían dedicarse a los quehaceres del hogar dedicando 12 horas a los detalles de la casa, echaban al hombre lo ponían a construir el mundo y desde casa conformaban la vida en el planeta. Había un equilibrio.
Por supuesto una vez el mundo está construido, ya se ven dispuestas a tomar el mando del mundo echándole un pulso a los obreros que lo construyeron aspirando a controlarlo todo, pero ahora en vez de desde casa y cada una aguantando al marido de turno, ya desde fuera comandando todos los puestos de trabajo que sean más de mandar o charlar y menos de gastar julios (trabajo propiamente dicho).
Hasta aquí todo bien, Dios las doto de capacidad de mando y todo hombre casado sabe quien es el "Ama de casa" se dedique esta o no, a las tareas del hogar, ellas simplemente ven que es una obviedad que la casa es su terreno y ahora también el mundo (que ya es como un hogar claro, ya está construido).
No pasaría nada si a la vez que abandonan la gestión de las casas y se ponen a cobrar dinero fuera de casa, dejaran la gestión de la casa a los hombres manteniéndolos con sus sueldos, pero no.... una mujer no siente ni remotamente que sea su labor como asalariada mantener a nadie, así pues el hombre sigue siendo obligado a trabajar fuera de casa, el resultado final son casas no gestionadas.
Y finalmente la falta de gestión de las casas hace que se coma peor, productos unitarios envasados en plásticos que al final terminan en los océanos inundandolos de podredumbre, y es que tanta ambición pero con tanta falta de aprecio por los demás está arrasando con el planeta.
Por que antiguamente los hombres a base de esfuerzo y trabajo si se sentían orgullosos, nobles, caballeros... Aportando con su esfuerzo las provisiones al hogar y mantenían a quien hiciera falta... Pero cuando las mujeres están en el poder, no son capaces de mantener a nadie, ahí la cosa cambia y este desajuste lo pagan los océanos, los bosques, los animales, el planeta entero...
Señoras, trabajen o no trabajen hagan lo que quieran, pero no se saturen por querer estar dentro fuera, querer recibir de dentro de fuera, quererlo controlar todo, estar para todo, para todos, en todo momento y para toda circunstancia, son ustedes su mayor tensión, y esa tensión la transmiten el mundo, aumenten la cordura y reduzcan la ambición... y solo les quedara sonreír y disfrutar, y con eso nada falta...