Sonando en tu cabeza desde los 80
En el cento de una estancia oscura hay situados dos postes y un cable que los une de lado a lado.
En un extremo, una serie de letras / numeros / figuras geométricas con bracitos y piernas (algunas veces hasta con mochila) intentan cruzar, una a una, haciendo equilibrismo.
Cuando llegan a la mitad suena una especie de timbre agudo que me provoca una angustia indescriptible y hace que caigan.
En una de esas me despierto.
Tu mentira en abril en marzo
Mi tiempo libre se ha visto dramáticamente recortado desde que nació la nena y lo que antes eran maratones de series de a hora por capítulo con una buena resaca en el cuerpo, se ha convertido en ojear capítulos de series de veinte minutos en el móvil mientras Peppa Pig va de listilla en el plasma de mil pulgadas.
Gracias a esta habilidad este fin de semana pude ver Your lie in april, un anime bastante chulo de veintipico capítulos con unos chavales músicos como protagonistas que cuando te la terminas te deja con un vacío coronario bastante acusado.
Me gustó tanto que he estado escuchando una playlist con las piezas clásicas que componen la banda sonora.
Lo planeta
Hasta que esta noche la lista de reproducción automática ha decidido reproducir Arabesque nº1 de Debussy. Los primeros compases me han puesto el cuerpo raro, los segundos compases me han agarrado el estómago desde abajo.
Esta pieza me jode la vida porque una versión electro, obra de Isao Tomita, era la sintonía de un programa infantil de los 80 llamado Planeta imaginario que me provocaba un agobio bastante intenso, tan raro y surreal era. Escucharla me pone enfermo, me ocurre desde siempre.
Voy a tener suerte
La nostalgia es un asco pero así es la vida, he abierto mi buscador de confianza y he buscado información sobre el maldito programa infantil de los 80.
Entre el listado de blogs típicos que ensalzan el ayer como si no hubiera un mañana, la sección de videos me sugiere unas capturitas muy interesantes que no hacen más que reafirmar mi malestar estomacal. Entonces, de repente veo...
La A
En la romería de San Blas descubres que tu ex ha empezado a salir con el más garrulo del pueblo y decides que es hora de pasar página. Digo yo que esto debería ser igual.
Esta noche se ha revelado que la raíz de mi pesadilla recurrente más antigua proviene de un programa de pesadilla. Ahora mismo debería ocurrir una pequeña catarsis que anulara el poder que ambos ejercen sobre mí, ¿no? La verdad os hará libres, hostias ya.
Pues no, son las tres de la mañana y aquí me tenéis sudando y vomitando hasta el pan bimbo que me comí la primera vez que vi el programa. Ver esa letra solo ha conseguido unir lo peor de dos mundos y elevarlo al cuadrado. Cthulhu y Toni Cantó de despedida de soltero.
Le he contado todo esto a mi mujer cuando me ha preguntado que qué me pasaba y una moraleja ha surgido de su respuesta: esto debe ser muy importante para ti, pero que sepas que es una gilipollez.
¡Gracias!» 
Barbacas 
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