He encontrado en este blog una serie de proverbios coreanos que me han parecido bastante interesantes, y ya que llevo meses sin escribir nada aprovecho y hablo un poco de mi cultura.
No voy a explicar en detalle qué significa cada uno, porque creo que por la traducción literal se puede entender, más o menos.
개천에서 용 난다 (gaecheoneseo yong nanda)
Literalmente: desde el río, un dragón se levanta
가려운 곳을 긁어 주다 (garyeoun goseul geulgeo juda)
Literalmente: Rasca donde te pica
고생 끝에 낙이 온다 (gosaeng kkeute nagi onda)
Literalmente: El disfrute llega al final de la dificultad
말을 냇가에 끌고 갈 수는 있어도 억지로 물을 먹일 수는 없다 (mareul naetgae kkeulgo gal suneun isseodo eokjiro mureul meogil suneun eopda)
Literalmente: Puedes llevar un caballo al río pero no puedes obligarle a beber
궁하면 통한다 (gunghamyeon tonghanda)
Literalmente: Si uno está desesperado, encontrará cómo salir
En contraste con la creencia de que las culturas varían enormemente, he encontrado fascinantes semejanzas en los proverbios procedentes de España y Corea. Las similitudes identificadas entre los proverbios de estas dos culturas se relacionan con los temas que abordan, como la pobreza, las diferencias de clase, la sumisión, los miedos, pero también la actitud saludable hacia la vida, incluso en casos de desesperación.
Esto puede atribuirse al hecho de que las personas de todo el mundo comparten no sólo la forma física sino también las necesidades básicas, como la seguridad, la alimentación y la vivienda, y las experiencias como seres humanos.
Al mismo tiempo, los proverbios investigados se aprovechan de contextos locales específicos y, como tales, son más difíciles de comprender para los extranjeros sin ninguna información adicional. Muchos de los proverbios sometidos a análisis contienen elementos léxicos que describen referentes típicos de las dos culturas, que en muchos casos son intraducibles. Es el caso del yangban y el kimchi para el coreano.
Otros elementos propios de la cultura coreana son el dragón o el pastel de arroz, mientras que para los españoles, a diferencia de los coreanos, utilizan con frecuencia nombres propios ("más feo que Picio", "como Pedro por su casa","no ha venido ni el Tato"), lo que da un tono sarcástico.
Otras diferencias se relacionan con la estructura de los proverbios en esos dos idiomas: mientras que en el español nos encontramos muy a menudo con frases que riman, esto rara vez ocurre con los proverbios coreanos.
Schipper dice que "las observaciones verbales sobre los elementos más preocupantes de la vida que compartimos constituyen un excelente punto de partida para un mejor entendimiento mutuo sin sospechas, hostilidad o polarización". Explorar correctamente nuestros legados culturales juntos (...) es una excelente manera de construir puentes entre las culturas" o de cruzar las fronteras culturales.