Juanra, un joven malagueño, deberá pagar casi 8.000€ por pintar una decena de objetos del mobiliario urbano para "descontextualizarlos" y ponerlos en valor. Hace siete años el Ayuntamiento de Málaga hizo una apuesta: D Face, Obey o Invader, para que dejaran su huella en la ciudad. A los dos primeros les pagó 12.000€ por pintar sendos murales a la orilla del Guadalmedina, mientras el segundo dejó sus icónicas figuritas en fachadas protegidas del Centro Histórico, caso que la justicia todavía no ha resuelto.