Un hombre en Pennsylvania llamado Ryan Collins y de 36 años de edad, ha sido acusado de piratería informática por el hackeo cuentas de Apple y Google de más de 100 personas, incluyendo celebridades, entre noviembre de 2012 y septiembre de 2014. Al parecer enviaba correos electrónicos falsos que pretendían ser de un representante de la de la compañía, consiguiendo mediante esta artimaña que las víctimas le entregasen su información de registro. Se enfrenta a una pena máxima de hasta cinco años de prisión.