En su último artículo, Ifriqui, que ha trabajado muchos años en la cadena de televisión pública de Marruecos, anunció hace unos días su “derrota” ante las presiones, amenazas y coacciones de las que ha sido objeto durante largo tiempo por parte de los servicios secretos del país africano. En esta ocasión el régimen apuntó a sus hijos, algo que ella ya no pudo seguir aguantando. Su “delito” fue apoyar públicamente al Movimiento 20-F, una ola de indignación que reclama democracia y que ha agitado el país en estos últimos dos años.
|
etiquetas: libertad de expresión , marruecos , periodismo , amenazas