Este año no habrá quesos rodantes en las colinas de Cooper, en el Reino Unido. Durante siglos, los habitantes del Gloucestershire han sido fieles a la tradición de perseguir grandes bolas de queso rodantes por su escarpada colinas. Sin embargo, este año el evento ha sido cancelado.Los organizadores del evento estaban preocupados por no ser capaces de reunir todas las normas de seguridad que éste exigiría. "El año pasado acudieron 15.000 personas", afirman "son tres veces más de la capacidad que tiene el lugar"