La estatua de Neptuno de la Plaza del Parterre amaneció ayer decapitada. Los fastos del triunfo de España en el Mundial de Sudáfrica han pasado factura al patrimonio cultural de la ciudad. La ya maltrecha figura del dios del mar que en el siglo XVIII realizo el artista Giacomo Antonio Ponzanelli fue la más perjudicada en la ciudad después de una larga noche de celebraciones. Los vecinos de la céntrica plaza ajardinada fueron los primeros en dar el aviso a la policía. La estatua había sido brutalmente atacada perdiendo buena parte de la cabeza.