Los vecinos alertaron a la policía de un hombre que estaba realizando maniobras extrañas con su coche y que había entrado en una calle en dirección contraria. Los agentes vieron que el hombre, que estaba en un bar, iba bebido y decidieron inmovilizarle el coche con un cepo como medida provisional. Sin embargo, cuando salió del bar, se subió al coche, lo puso en marcha y recorrió unos tres kilómetros hasta que le reventó la rueda.
|
etiquetas: cepo , coche , borracho