La bromas televisivas están de moda desde hace muchos años, pero ninguna ha necesitado la complicidad de tantas personas como la que sufrió un aficionado durante un partido de la NCAA entre las universidad de Maryland y Wake Forest. En el descanso del partido un programa de la MVT hizo creer al inocente que si metía una canasta desde el centro del campo con los ojos tapados ganaría la friolera de medio millón de dólares.