No va a provocar un deseo repentino de comer cerebros: el arma ataca el sistema nervioso central, dejando a su objetivo en un estado como el de un zombi. El arma utiliza la radiación electromagnética, como la que se encuentra en los hornos de microondas."Cuando se utiliza para dispersar a una multitud y se centra en un hombre, su temperatura corporal sube de inmediato, como si le meten en una sartén. Sabemos muy poco acerca de esta arma, e incluso las fuerzas especiales difícilmente pueden hacerle frente " Traducción aprox
bit.ly/Iy8BVp