La carne roja se acompaña con un tinto para paliar la sensación grasienta con el sabor astringente y áspero del vino. Un grupo internacional de nutricionistas demuestra ahora que alimentos poco astringentes, como el té suave, también son capaces de reducir la huella gustativa de la grasa si se toman de forma continuada. Este tipo de hallazgos ayudan a elaborar los menús de los mejores gastrónomos.
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