Estamos viviendo una época bombardeados por el pseudo-3D. Nos quieren vender las representaciones en 3D, cuando realmente no lo son. Las actuales “televisiones 3D” son realmente estereoscópicas ya que si movemos la cabeza (cambiando el punto de referencia de visión) seguimos viendo la misma imagen y lo que realmente debería ocurrir es que cambiáramos la perspectiva de lo que estamos viendo.