Mi maravilloso tío Simon Barnes nos fue arrebatado repentinamente. El hombre más amable y talentoso que hubieses podido conocer. Era amado por todos los que lo conocieron y lo será por siempre.
Al parecer, las bajas temperaturas en todo el norte de Europa, entre 3 y 7 grados centígrados el día que fue hallado muerto, provocaron la inesperada muerte.