También se me ocurre que el estado español puede paralizar todo envío de divisas desde España a Bolivia, o ponerles un impuesto del 75% ya verás que risa. #106
#77 No es lícito discriminar a una persona por sus ideas políticas aunque estas se expresen en público.
No es que no sea legal, es que además vulnera los derechos fundamentales. Si tú defiendes eso, es tu problema. #78 Irrelevante, no se puede discriminar a una personas laboralmente por sus ideas, aunque fuera un paquete, un vividor y todo lo que quieras decirle, no se puede coño.
#68 El trabajo es un bien público y debe estar en manos de españoles antes que de extranjeros según vuestra teoría seguidista de Evo.
Así que todos los trabajos ejercidos por Bolivianos deberían ser expropiados, sus permisos de trabajo anulados y sus propiedades expropiadas por un justiprecio ridículo a pagar en 15 años. Al igual que hacen los populistas sudamericanos.
Y a ver qué iban a hacer muchos bolivianitos sin esas remesas
#28 No existe la libertad de empresa si reconoces que no contratas o despides a una persona por sus ideas políticas, estás cometiendo un delito contra las libertades fundamentales y un delito contra los derechos de los trabajadores.
Discriminar laboralmente a una persona por motivos ideológicos es ilegal.
Si yo fuera Salva Ballesta denunciaba al Celta y que les metan un paquete. #2#5#4#70
#61 Discutes contra la pared, en una situación similar como fue la de Ratzinger, esta gente le acusó poco menos de ser el que organizó la solución final.
#50 Yo hasta que no pongan datos concretos, no puedo emitir un juicio sobre este señor.
A ver si va a resultar otro bulo sensacionalista como que el Papa Ratzinger era un nazi.
#28 Te vuelvo a repetir la pregunta, ¿con cuántos años entró este señor en las SS y en qué condición lo hizo?
¿voluntario?, ¿forzado?, ¿en tiempos de paz?, ¿en plena guerra?
#194 Considero que al igual que los abertzales puede justificar el terrorismo pre1978 yo también puedo justificar un acto de guerra como fue el apresamiento y ejecución de dos miembros del ejército rival.