#5 el protocolo. Invento para que los médicos (y otros trabajadores) no tengan que usar la cabeza ni asumir responsabilidades sobre su trabajo...
Debería ser orientativo debido a sus limitaciones (El protocolo nunca puede tener todos los casos posibles ni todas las excepciones) pero es más cómodo aplicarlo como si fueras un autómata, y de paso lavarte las manos.
#31 pues yo al interpretar las comillas en el titular entendi perfectamente que no hay prohibicion directa, y una ocultacion de los resultados no es censura pero es una mala practica.
Mas les vale aceptar su cuerpo tal y como es, con sus ambiguedades y sus imperfecciones, como hacemos todos los demas seres imperfectos, porque pidiendo intervenciones quirurgicas y tratamientos irreversibles con graves efectos secundarios solo estan agravando su problema y gastando un dinero que no tememos, porque aunque se atiborren a hormonas se suicidan igual, son autodestructivos, y los artificios tienen sus limitaciones. Tambien es cierto que los demas debemos aceptarlos y respetarlos como personas humanas que son, lo que no quiere decir que haya que aceptar su inutil lucha contra su propia naturaleza, ni seguirle el juego a ciertas organizaciones que solo buscan manejar dinero y generar dependientes.
#16 Vamos a ver, que has sido tú la que ha mencionado los escalones, y si te los saltas para una simple lumbalgia eres un matasanos.
Veo más sesgos por tu parte y nula aportación de referencias (como por ejemplo las estadísticas de uso de opiáceos, que apuesto a que están desfasadas), así que yo tampoco voy a trabajar para buscarte ese estudio del ibuprofeno (que sí existe), y menos seguir debatiendo con alguien con tantos delirios de grandeza y aires de salvadora. Cuando vayas cogiendo más experiencia te llegará la cura de humildad como a todo el mundo.
#134 La gente de la que hablo apenas sobrevive con su sueldo, así que menos puede ahorrar. Si consigue hacerlo pues acabará siendo del bando contrario y parasitando a otros desgraciados mediante rentas, así que la guerra no tiene fin. Es duro pero es el mundo en el que viviemos. Si a ti te han tocado buenas cartas, pues normal que defiendas lo tuyo.
#14 En la casa o en el hospital, el dolor es el mismo. Y casualmente se están saltando ese escalón si alguien te manda morfina como primera opción, como los casos que comento.
#29 Para que unos estén mejor otros tienen que estar peor. Es normal que los que estén peor deseen igualdad porque los que tienen privilegios no van a mover un dedo por ellos, sino más bien todo lo contrario. Harán lo posible por mantener su estatus, sangrando a los esclavos en forma de rentas y votando por mantener el sistema.
#12 Habiendo otras opciones como ibuprofeno, con menos efectos secundarios y perfectamente perscribible, las adminitraciones no fueron correctas, sobre todo en el caso de la lumbalgia. No hace falta hacerle pasar el dolor.
#7 En todos los casos fue morfina intravenosa en hospital, y como primera opción. Para algunos es el camino correcto pero eso es su opinión personal. El dolor siempre se puede pasar e incluso sirve para aprender y no volver a meter el dedo donde no debías . No hay necesidad de aliviarlo siempre con drogas, sobre todo cuando hay riesgo de acabar enganchado o con ideas suicidas.
El problema del profesional es que salvo excepciones nunca se pondrá en el lugar del paciente ni le interesa el riesgo a largo plazo, e incluso puede que le interese que su paciente acabe enganchado y así ganar un cliente de por vida. Por eso la ley da la última palabra al paciente y debe ser él mismo el que administre su salud, siendo el papel del profesional de informador.
#4 En España yo he visto dar morfina a niños con fractura en un dedo, y a adolescentes con lumbalgia, sin hernia visible ni fractura de ningún tipo, hace unos cinco años atrás. El uso de morfinas va en aumento en todo el mundo, y en pacientes terminales también pero es donde está más justificado.
A una persona joven y sana no deberían meterle ese veneno, porque todo tiene consecuencias. De hecho yo no tomaría morfina por unas costillas rotas, y te lo dice uno que practica artes marciales y le han roto unas cuantas.
En España se abusa de las morfinas, y de los medicamentos en general, sin pensar en las consecuencias ni mucho menos avisar a los pacientes de las mismas. De hecho jamás he visto a un médico avisar a un paciente sobre algún efecto secundario, salvo excepciones como quimioterapias.
Y luego pasan estas cosas; personas como las del meneo que padecen daños en algunos casos irreversibles porque su médico recetaba con demasiada alegría, lamentándose porque nadie les avisó. La medicalización se ha convertido en un gran negocio y la culpa en parte es nuestra, que tenemos a los médicos idealizados, pensamos que pueden arreglar todos nuestros problemas a golpe de receta y se nos hace raro salir de la consulta con las manos vacías.
#5 ¿Y qué opinas de la multa que le pusieron al director del colegio Juan Pablo II de Alcorcón? Sancionar sin juicio a alguien por escribir una carta (tenga o no razón) es propio de dictaduras.