#4 supongo que serás de los que aceptas las cosas tal como son, tanto si violan a tu hija como si te pegan una paliza como si te quitan la casa, siempre que haya alguien que se beneficie de ello, claro.
#14 De hecho fue posible el holocausto ayer y el genocidio hoy gracias a que existen muchos como este
#7 tristemente creo que ese discurso vende bastante. ¿A santo de que no le están poniendo las mismas trabas que a Rusia? Pues que mucha gente defiende (o por lo menos entiende hasta el punto de tolerar) lo que Israel esta haciendo, en gran parte por el asalto al festival que inicio todo esta oleada de muerte.
#15 La derechusma se deja de que no se adaptan, De que van por ahí apuñalando gente, y de que intentan islamizar su pais.
Me parece que no es desviar el debate, lo primero cuando alguien se queja es ver el por qué
#6 Son unos cobardes. Solo se atreven a amenazar ancianas e inmigrantes que tienen miedo a denunciar. Mira como con los gorrillas no se meten, porque saben que por muchos ciclos que se pinchen les van a tumbar.
#15 sólo hay que leer quienes están detrás, Diagrama... que si investigas un poco... telita tela. Y ahora Ginso. No consiguen licitaciones precisamente por ofrecer resultados, sino por hacer bajas temerarias y ser la mejor oferta (en lo económico) para llevarse este tipo de gestiones del tercer sector. Y como en todo ese sector, cuando se externaliza y abarata, los únicos que sufren son los usuarios (y los currelas)
#10 Cual es el control? Cuanta gente de estos sitios se saca el instituto, la FP, o va a la universidad? Porque si no van, es que estos sitios no funcionan.
#32 Si has adquirido todas las habitaciones, perfecto, haz lo que quieras, si no, respetas a los demás.
Y si activas la alarma y no hay incendio confío en que te encontrarán y te multarán, como debe ser.
No pudiste luchar contra Hitler, pero si votas progresismo es como si lo hubieses hecho.
Te conviertes en un luchador contra el supremacismo blanco, contra el odio y contra todas las fobias de la ultraderecha. No tienes que hacer nada, ningún esfuerzo, ningún dinero, ningún compromiso, solo votar y hablar progresista.
Automáticamente pasas a ser un valiente héroe luchador contra el odio, tranquilamente, tumbado en el sofá de tu casa. Entre votación y votación puedes comprar un bolso arcoiris y eso es ya la culminación del heroísmo antifascista.