En fallas en Valencia hay un problema, se une el hambre con las ganas de comer, no hay efectivos de policia suficientes para tanta gente y los que hay ya han optado por pasar del tema por cansancio. Se han convertido en las fiestas del todo vale y es una verdadera lastima, ojala las hubieseis descubierto hace unos 10 años, cuando de verdad eran unas fiestas a la que merecia la pena venir y no la feria en la que las han convertido.
En la comunidad valenciana aun así siguen utilizando su versión de una famosa frase de una película infantil: "En educación, no hay recortes."