Esto es un fracaso grave por parte de las autoridades. La noticia dice que llevaban años actuando en Bizkaia. Las autoridades son responsables y creo que como ciudadanos no debemos dejar de exigir profesionalidad, incluso perfeccionismo en materias de seguridad ciudadana.
#205 me da igual porque los heteros me caéis mal. No me gusta vuestra forma de andar, de hablar, de saludaros, me provoca ira veros entrar en una sala. Sencillamente he desarrollado una heterofobia que no puedes ni imaginar. Me producís auténtico rechazo. Qué os cuesta ser un poco menos "normales"?? Explícame
#18 Crees que deberíamos bajar la intensidad de nuestras propuestas, porque te molestan un poquito? Sabes lo que me molesta a mí un poquitín también? Que me pregunten "Quién es la chica en la relación?" en un autobús cuando se me escapa una caricia con mi pareja. Pues no señor. Te vas a comer estas protestas con patatas. Límpiate la barba.
#16 Otro INCAPAZ de admitir que vivimos en una sociedad ultra machista. Ojalá tu hijo te salga maricón y te des cuenta entonces de la mierda que tienes en la cabeza.
La masculinidad frágil:
Cuando un hombre, “macho”, heterosexual “del todo”, está seguro de su sexualidad, no es tan esperable que la conducta afeminada o no normativa de otro sujeto le produzca odio. En cambio si el agresor tiene un conflicto emocional interno de este tipo, por ejemplo, tiene fantasías sexuales con gente de su sexo pero vive aparentando una masculinidad exagerada, podría atacar a aquellos que, mediante su mera existencia, pongan en entre dicho su propia conducta...porqué ? Porque es más fácil atacar a aquello que te produce conflictos internos que aceptar esos conflictos. Eso lleva mucho trabajo.
Se produce un efecto espejo. Atacamos en los demás aquello que repudiamos de nosotros mismos.
Si hay odio interno (hacia ti mismo) lo más probable es que ese odio se vea reflejado en aquellas personas a las que se atacan.
Igual que cuando nos reímos de alguien. Había un psicólogo que decía: Cuando nos reímos de alguien en realidad nos reímos de nosotros mismos.