#9 hombre, el Broken Sword, Monkey Island, Grim Fandango y compañía tienen mucho de coctelera, y eso era otro factor del juego que los hacía excelentes, ya que no sabías por donde tirar. Ademas en aquella época no había youtube, ni guias tan detalladas, ni internet tan extendido, era más de romperse la cabeza uno mismo. Mejores tiempos sin duda.
¿Por qué no llega ninguna noticia de la represión dictatorial chavista a portada?
Igual más de un zombi de ultraizquierda que se cree que Venezuela vive en los mundos de yupi se lleva un chasco, pero la represión que están viviendo los pobres estudiantes está a nivel norcoreano, de auténtica vergüenza el apagón informativo en esta web.
Esto me recuerda al capítulo de los Simpsons donde Homer dice "me echan de la universidad por mis comentarios sobre el Vietnam", y por lo bajini "bueno, y por mangar unos proyectores..."
A los que hablan de temerarios y tal, la ola los arrastró estando la familia a 3 metros de la orilla de la roca. Y estaban rindiendo homenaje a un fallecido, cuyas cenizas habían depositado.
Un comunista, un idiota. Lo que no terminaré de entender nunca es cómo hay gente que se autodeclara comunista y no se le cae la cara de vergüenza, lo dicen orgullosísimos los notas. Lo que hace la ignorancia.
Es errónea salvo que se cambie el título a "en su lanzamiento" o "hasta una actualización posterior", "no de serie", algo por el estilo. Ya han confirmado que lo implementarán en una actualización posterior.
De todas formas es lamentable, sacar el cacharro con prisas por 400 euritos de nada.
Pues hombre, un pelín tontitos sí que son. Luego querrán la realidad social de Noruega o el paro suizo, pero sin que me toquen el petróleo, no vaya a ser.
#31 yo soy de Ferrol y de 'cafetería' éste no tiene un pelo, hay mucho viejo y ludopatas de todas las edades. Y ya por las noches mamaos, pero esos pierden rápido.
y de 'cafetería' éste no tiene un pelo, hay mucho viejo y ludopatas de todas las edades. Y ya por las noches mamaos, pero esos pierden rápido.
Igual que uno puede emborracharse sin pisar un bar o ver el futbol sin ir al estadio de turno.