#33 no sirve de nada que se disculpe el cardenal, el papa o Dios todopoderoso si lo único que hace la iglesia con los pederastas conocidos es cambiarlos de parroquia en vez de denunciarlo.
Es magnífico ver que por lo menos alguien en el mundo decide salir de la manada y hacer lo que realmente importa, que es vivir.
Felicidades por el valor.