Antes de leer y harto de vivir bajo los caciques valencianos sólo debo decir que tenemos lo que nos merecemos aquí.
Que los trabajadores de Canal 9 sólo han movido el dedo cuando han visto las barbas del vecino en el suelo.
Que ahora son muy valientes, pero antes se callaron.
Que hay muchas horas de video grabadas en un cajón, que harían sonrojarse hasta al más insensible.
Odio llegar a clamar contra el cierre de Canal 9, plataforma de publicidad del gobierno de la Comunitat, pero lo siento en el alma por esas 1700 personas que se han enterado que están en la calle por un mísero comunicado, ni dar la cara ha sabido el impresentable de Fabra.
También he de decir que ayer lo vimos mucha gente por saber de primera mano qué estaba pasando.
Aunque si fuesen por la senda de contar las cosas como pasan y no como quisieran que hubiesen pasado, seguro que la audiencia sería muy aceptable.
Programas de calidad y contando noticias, solo eso es lo que queremos.