Parece que llevan en la sangre lo del genocidio, ya sea de una manera o de otra, puede resultar un poco duro pero es la impresión que dan a todos los niveles.
Este gobierno siempre tiene que ir por delante, eso si sólo en recortes, en privatizar, claro teniendo asesores tan incompetentes e incapaces como ellos, es lo que pasa. España es diferente y con esta clase de humanoídes en el poder más todavía.
La indignación est llegando al límite,y ellos siguen erre que erre, le importamos una mierda. Hasta cuado el expolio? No esunavrisis es una gran estafa.
Llámese CAtalunya , llamase España , la corrupción el enchufismo y los sueldos desproporcionados están a la orden de día, eso si hay, que estrangular a la clase trabajadora y a los menos desfavorecidos. Esto, aparte de ser una estafa es una crisis de valores, es una lucha de clases aunque lo quieren disfrazar, sólo quieren que el sol salga para ellos.
No es que se sienta responsable, es que lo es.Para eso si que se pusieron de acuerdo en cambiar la constitución, pero para modificar la ley electoral para eso no, y eso es muy importante, ni para la dacion en pago. Vergüenza me da.
Tenemos un gobierno que hará lo que sea para llevarnos a la ruina, a el que más le da, si mientras haya imbéciles que les voten, Hay alternativas para acabar con esta lacra, sólo hace falta que nos lo creamos.
Pago mis impuestos para tener una educación de calidad, una sanidad de calidad, una pensión, si eso no me lo cubren pues se deberiande dejar de pagar impuestos y estos que les gusta tanto mandar que cojan un pico y una pala y trabajen que mejor nos valdría gobernamos nosotros que tener esta clase de sinvergüenzas, ladrones y corruptos.
Esto es una democracia a la medida los gobernantes, que hacen y deshacen lo que les da la gana. Tenemos qué darnos cuenta y echar a toda esta casta de parásitos que se alimentan del pueblo de una manera descarada.
Este va por el camino de Garzón, al tiempo, aquí manda una elite de fasc.... que sí no se hace lo que ellos quieren te hunden. La historia lo demuestra. Es una pena de país