#27 así es. Ahora estoy viendo de nuevo Los Soprano en hbo y los subtítulos en español son pésimos. Al final he tenido que ponerlos en inglés. Usan mucha jerga y me cuesta seguir algunas cosas, pero es una mejora con los españoles.
#28 yo pensaba lo mismo. El cine es un arte audiovisual, y leer no tenía cabida. Luego pasé unos años viviendo fuera de España y cuando regresé ya no encontré el camino de vuelta al doblaje. No solo me resulta raro sino que sé que me la están metiendo doblada con la traducción. Además, los pocos doblajes que he visto en los últimos tiempos me parecen de bastante peor calidad que los de otras épocas.
#2 a mi lo que me dejó flipando de Los Soprano es que el actor que interpreta a Carmine Lupertazzi, uno de los jefes de Tony, es el tipo en el que está basado Green book (interpretado ahí por Viggo Mortensen).
#24 como museo, ese "enorme edificio" es superior al British, que en ciertos aspectos sigue anclado en las teorías museísticas del XIX. En concreto, la parte en la que las cariátides esperan a su compañera robada está hecha con mucha gracia.
Me alucina que siga habiendo gente que defienda el expolio (y destrucción, que hay que decirlo todo. No fueron especialmente cuidadosos) de los ingleses, pero que lo haga en los comentarios de esta noticia ya es de traca.
#71 totalmente. Cuando Trump llegó al poder comenzó su debacle intelectual, y parece que por fin ha conseguido lo que llevaba tanto tiempo buscando. Una pena, a mi Dilbert me gusta.
#29 totalmente. Podemos discutir si 25 años de derechos son suficientes, que si el autor está muerto etc, pero esa frase es repulsiva y arroja una duda: ¿si la foto es tan mediocre por qué la usan para su libro?
#21#22#26#30 Yo es que ya no creo que el problema sea si es listo, tonto, buen o mal CEO. El personaje se lo está comiendo y tampoco está siendo capaz de digerir el lugar mediático en el que está. A veces quiere ser el más molón, otras veces es un dictador y da la impresión que toma decisiones pensando más en la reacción del público que en otra cosa. Tampoco creo que sacar sus grandes éxitos empresariales valga demasiado para analizar lo que está haciendo en twitter, que parece más una guerra contra no sé sabe qué que un plan de negocio.