Las declaraciones del portavoz del Popular son de traca. Recurre directamente a las consecuencias negativas para los emprendedores para rechazar las exigencias de más provisiones. Alguien le debería haber recordado que si hubiera habido más control sobre los créditos e hipotecas que la banca concedió en el pasado quizá ahora si estaría fluyendo el crédito. En definitiva, creo recordar que las cajas no se han hundido por conceder créditos a emprendedores, sino por financiar negocios a sus amigos y conceder hipotecas en condiciones salvajes.
Me encanta la iniciativa. Sin embargo, deberíamos tener claro que la labor de este tipo de becas tiene que ser concienciar a la gente de que merece la pena emprender. No todo el mundo puede empezar con 100.000 dólares, pero con ideas, ganas y 10.000 euros sí que se pueden empezar a hacer cosas. A ver cuándo nos quitamos del coco la idea de que fracasar con una iniciativa empresarial es un fracaso irreversible. Tenemos que aceptar que para llegar a un éxito hacen falta varios fracasos.