Es complemtamente al revés, si los intereses suben los pisos bajan de precio.
No olvidéis que los intereses fluctuan, unas veces pagarás más y otras menos, pero si el precio de la vivienda ya está en el límite, la deuda sólo puede seguir creciendo.
Lo mejor es comprar cuando los intereses están en máximos, ya que la vivienda se vende barata y los intereses sólo pueden bajar.