Ha pasado que millones de obreros, cuando su situación mejoró por la presión de la izquierda se creyeron potentados y empezaron a apoyar, digerir y tolerar políticas de derechas. Y así les ha pintado. Y lo peor es que no lo ven.
#4 yo te lo aclaro, ya que no has buscado mucho... el jefe de prensa de Vox mandó la conversación a un grupo de periodistas que informan sobre Vox por error. Lo borró, pero ya era tarde.
Vamos que ninguna conspiración.
Simple falta de pericia.
Esto lo han comentado varios medio ya.
Pero claro es mejor insinuar que se ataca a Vox... típico victimismo ultraderechista.
De todos modos, que un presidente use el avión oficial, quizás deberían viajar en burro, les parece mal a los que se llevaban el dinero a Suiza y repartían sobre en B.
#2 si tu puedes votar, y disfrutas de otros mil derechos y no eres el súbdito de un rey que puede disponer a su antojo de tu persona y posesiones es gracias a que en 1789 Paris ardió empezando por La Bastilla. Tampoco entonces les dejaron, pero lo hicieron.
#62 es cierto, esto ha pasado decenas de veces este año. Basta ya a la epidemia de pobres embarazadas montañeras masacradas por ciclistas. Como os vuela la imaginación.
Al tío que pesa 130 kilos, que nunca se ha movido del sofá, que se atiborra a cervezas, pitillos y risketos mientras ve Netflix y que lleva nedligentemente tirando su salud por el retrete años ¿le cobramos también el traslado al hospital cuando sufra un ACV?
Es bien simple, ese es el horario en casa de una abuela... siempre dicen aquí se come a tal hora o se cena a tal otra. Pero la realidad es que siempre está abierto, da igual la hora.
#18 hombre te entiendo... siendo Cataluña una Arcadia feliz sin corrupción, irregularidades, ni vergüenzas... si en algo son muy españoles los catalanes es en el nivel de corrupción política.
Nos gobiernan psicopatas y eso solo lo arregla una guillotina, ya lo demostró la historia. Pero es demasiado tarde. Como se ahogo la primavera árabe es un ejemplo claro de quién controla todo desde los medios hasta la economía.
Y conste que esto lo escribe un empresario.