El llamado hachero de Nueva Orleans (Axeman of New Orleans) fue un asesino en serie que, entre mayo de 1918 y octubre de 1919, dejó seis víctimas mortales y otros tantos heridos. Al contrario que Jack el Destripador, las víctimas del hachero no eran prostitutas, sino mayormente inmigrantes italianos, aunque parecía tener una predilección por atacar a mujeres y los hombres solían ser daños colaterales. Su modus operandi solía ser colarse en las casas de sus víctimas por la noche, cuando estos dormían, y atacarlos en sus camas con un hacha.