Esta semana, Uber fue demandada en el Reino Unido por App Drivers & Couriers Union (ADCU), debido a una presunta discriminación racial por parte de los controles de reconocimiento facial de la empresa. Uber utiliza una tecnología FACE API de Microsoft para el reconocimiento facial en tiempo real. ADCU ha señalado que esta tecnología usada por el gigante tecnológico es «intrínsecamente defectuosa y generan resultados de precisión particularmente pobres cuando se usan con personas de color». Ya se han dado dos despidos.