Ánforas, monedas, esculturas, herramientas de navegación, incluso los propios barcos hundidos nos cuentan secretos de su cultura, vicisitudes, sueños y momento histórico. Esto es precisamente lo que estudia la arqueología subacuática y marítima: el pasado histórico y la cultura material inherente a la relación entre las sociedades humanas y el océano. La investigación de este patrimonio, disperso en los fondos marinos, en áreas costeras e intermareales y en otros diversos cuerpos de agua está aún repleta de enigmas a la espera de respuestas.