De hecho, a partir de la tragedia que la convirtió en un personaje célebre, la Antígona de Sófocles, representada en Atenas en el 442 a.C., esta mujer que se enfrenta al poder delante de la indiferencia general nunca ha dejado de fascinar a activistas, escritores, dramaturgos y filósofos. En realidad, la joven paga el precio de pertenecer a una familia sobre la que los dioses lanzaron una maldición. Lo recuerda Sófocles y, antes que él, Esquilo, en los Siete contra Tebas. ¿Cuál es la terrible maldición que la persigue a ella, a su padre Edipo,