#5 Hombre, una pregunta de verdad!

Abastecimientos: Hay problemas, muchos problemas. En los supermercados hay productos de todo tipo, pero a menudo vas y tratas de comprar algo y se ha acabado. Son frecuentes las colas a primera hora para poder conseguir cierto tipo de productos.

Comunicaciones: El teléfono dentro del país es baratísimo, pero todo lo que implica el exterior es muy caro. Internet cuesta 2 dólares por hora y una llamada desde mi móvil a España salía cerca de un euro el primer minuto (por lo que me salía más a cuenta comprar una hora de Internet y enviar mensajes).

Luz: Ni un solo corte en todo el tiempo en el que estuvimos. Era algo que esperábamos. Nos comentaron que los apagones terminaron hace unos años cuando se culminó un plan para reducir la potencia consumida (cambio de bombillas incandescentes por bajo consumo, cambio de refrigeradores, etc).

Censura: Fue un punto sorprendente. Esperábamos mucha censura y la verdad es que no la había en absoluto. Fuimos a espectáculos humorísticos dónde el cómico de turno ponía a caldo al gobierno y bromeaba sobre diferentes aspectos de la "revolución" (para entendernos sería el equivalente al humor que hace Buenafuente). También fuimos al cine a ver películas críticas con el régimen como "Fatima o el parque de la fraternidad" o "Regreso a Itaca" y vimos allí películas norteamericanas sin ningún tipo de censura. De hecho, hay decenas de tiendas de películas (lo mismo que aquí los manteros, pero allí es legal y hay tiendas) donde venden sin cortapisas todo tipo de películas, incluso vi algunas realmente críticas con el socialismo, como "La vida de los otros". Lo mismo en libros, se venden por ejemplo los libros de George Orwell o ensayos críticos tanto de cubanos como de extranjeros (no obstante, son elementos minoritarios, las librerías tienen muchos más textos a favor que contra el socialismo). Por otra parte, la gente se expresaba de…   » ver todo el comentario

#7 Sí, mucho. Los más jóvenes creen que estos movimientos que están ocurriendo entre su gobierno y el de EEUU puede suponer el fin del bloqueo y una apertura de Cuba hacía ciertas medidas capitalistas. Los más mayores, especialmente aquellos que vivieron con Batista, tienen bastantes reticencias y no terminan de estar tan convencidos. Sin embargo, el optimismo es generalizado. Estuve allí el día que se reabrieron las embajadas y la opinión unánime fue que era un buen gesto y que querían más.

#10 Disculpa la tardanza en responder.

Sí, he estado en Panamá, Argentina, Chile, Brasil, Paraguay y Perú. ¿Qué tipo de comparación quieres establecer? Cada país tiene su idiosincrasia e historia particular y compararlos sería hasta cierto punto injusto.

En cualquier caso, si tuviera que establecer así una comparación general diría que lo más destacable de Cuba respecto al resto es la igualdad. Probablemente Cuba sea más pobre en general que Brasil, Chile o Argentina, pero sin embargo no hay ni un solo mendigo, nadie sin un techo y, aunque los cubanos se pasan el día quejándose por la comida (por el precio, la escasez, etc), no vimos ni una sola persona desnutrida o que no pudiera comer a diario. En el resto de países siempre encontramos miseria, en Cuba solo pobreza. De la misma manera te digo que en todos los demás países pudimos encontrar riqueza, gente que realmente tenía mucho más que el resto de sus semejantes, mientras que en Cuba ricos, lo que se dice ricos, no hay.

Otra diferencia notable es el nivel de seguridad. En Cuba puedes caminar tranquilamente por la calle a cualquier hora del día o de la noche. Eso no significa que no haya robos: supimos de un caso de una turista taiwanesa a la que le robaron la cámara con un "tirón" una noche en Santiago. Con el auge del turismo y la mentalidad de los jóvenes actuales está aumentando la delincuencia hasta niveles que para los cubanos perciben como escandalosos, aunque ya los quisiéramos aquí en Alicante, por ejemplo. Ah, por supuesto, estoy hablando de robos, los timos y pequeñas estafas a turistas son algo habitual, aunque las cantidades estafadas sean mínimas.