Acabo de ver una "entrevista" en la Sexta. Vergüenza ajena es lo que he sentido, viendo a alguien defender lo indefendible. Miserables y contrarios a los derechos humanos son los que quieren quitar la protección a las mujeres víctimas de violencia doméstica (que son la mayoría); pero miserables y contrarios a los derechos humanos también son los que defienden que la "asimetría jurídica" y que se proteja o se condene más o menos según las distintas combinaciones de lo que le cuelgue entre las piernas a víctima y verdugo.
Unos miserables y el mayor peligro para la derechos humanos básicos que tenemos hoy en día.