La población ibérica está decreciendo, sobre todo debido a la emigración. Y en las regiones en las que hay aumento, éste no se debe a la inmigración, sino a la natalidad.
Este dato contrasta con el de otras regiones de Europa occidental, donde la tendencia es la contraria.
Si bien es cierto que las costas y aeropuertos ibéricos reciben una gran cantidad de inmigrantes, los datos parecen indicar que la mayoría de ellos usan este territorio como zona de paso, y siguen su camino hacia el centro o norte de Europa.
Fuente: Eurostat, datos de 2012 - 2016