Pobre bicho, los koalas son taaaaan achuchables...
Por cierto, un pequeño detalle: la enfermedad clamidia urogenética no existe, es clamidia UROGENITAL, nada que ver con herencias ni modificaciones genéticas, sino con una infección de chlamydia en la zona urogenital. Lo curioso es que todos los periódicos digitales españoles que han publicado la noticia han transcrito el mismo error, y me da que pensar dos cosas: o que el traductor de agencia estudió inglés en opening, o que a los de digital se les fue la mano con el copipasteo entre portales de información.