Lo que le molesta a algunos que haya países soberanos que se hacen respetar. Si en Cataluña, o País Vasco, hubiese una serie con una persona similar llamada España, y con un perro llamado Juan Carlos, la serie no sólo habría sido cancelada, y millones de personas estarían insultando como locos a vascos y catalanes por todos lados, si no que los responsables de los mismos se verían las caras en los tribunales. Por cierto, nadie habla del otro programa retirado, porqué será. El cuentico de la libertad de egprezión está muy manido ya. Todos sabemos en qué consiste esa libertad: dejarnos hacer lo que nos da la gana, incluso promover, impulsar y apoyar golpes de estado en directo, hasta que caiga la dictaduraaaaaaaaaaaaaaaaa. Y si se atreven a ponernos algún límite, por corto que sea, entonces decimos que nos están censurando. Y a los delinquentes corruptos los llamamos "exiliados políticos", y a los golpistas confesos "represaliados por el réeeeeegimennnnnn", y así sucesivamente. Vamos, vamos. Primero desprogramaros de las emociones negativas que os han educado a desarrollar respecto de Chávez y su gobierno, y luego igual podeis hablar con una mínima seriedad de lo que ocurre en Venezuela, incluso de manera crítica. Mientras tanto, como el perro de Paulov, os tocan la campanilla y babeais, aunque no haya comida.