El tío dice una y otra vez "muy buenas noticias" a la vez que anuncia más paro, más recesión y el hundimiento definitivo del mercado de la vivienda. Joder, ya decía no recuerdo quién que la economía es la "ciencia lúgubre".
Falta la muerte de las muertes, la que ninguno podemos olvidar: la de Bergman en 'El séptimo sello'. La imagen de 'Los cuatro jinetes del Apocalipsis', de Vicente Minelli. Hay una muerte literaria de Woody Allen a la que un tipo le gana la vida y una pasta jugando a la cartas. Y, ya puestos, falta ese episodio de Halloween de Los Simpson en que Homer acaba provisto del dedo de la muerte.
Si leen cuidadosamente la noticia, verán que lo que está (re)naciendo en Tesalónica es una antiquísima organización helénica: la "polis", la organización ciudadana de reducidas dimensiones, autogestionada por los propios ciudadanos y cada vez más desvinculada de organizaciones políticas superiores. Grecia va a tener que reinventar la democracia -el verdadero gobierno del pueblo- para sobrevivir. Y posiblemente tengamos que imitirla, si es que somos capaces de ello.
Buenísimo el artículo. Es evidente que Nixon merece su apodo de Tricky Dick por algo más que el Watergate. En cuanto a Milton Friedman, su premio Nobel de Economía es como una burla sangrienta.
¡Ya era hora, hombre! Estudiantes aporreadas, una comunidad autónoma en la ruina, "reforma" laboral para machacar al trabajador de a pie... Si algún gobierno se ha ganado a pulso una huelga general en sólo cuatro meses de gobierno, ha sido éste.
Gran artículo, que me aclara muchas dudas. Sí percibía que la soga, recibo tras recibo, se apretaba cada vez más a mi cuello. Ahora entiendo por qué. La cuestión es: ¿qué podemos hacer los consumidores comunes y corrientes para cortar la soga?
Aunque este vídeo es antiguo, merece la pena revisarlo. Explica muy gráficamente cómo se ha distorsionado nuestro concepto de la belleza física. Sólo esta distorsión explica casos como el de la noticia:
Los responsables del despilfarro o de la gestión negligente del dinero público deben acabar ante los tribunales, como ha sucedido con el ex presidente de Islandia. Mientras esto no se incluya como un precepto democrático básico, incluso en la Constitución, nuestro dinero seguirá siendo despilfarrado (eso, expresándome con generosidad) por los gestores públicos.
Yo sólo distingo dos colores: rojo y verde. Con el rojo paro el coche y con el otro sigo. Hay uno en medio que le llaman "ámbar", y que a mí me parece amarillo o naranja según lo guarro que sea el concejal de tráfico del ayuntamiento. Ése te dice que aprietes a tope o se enciende el rojo.
Hoy, de Guindos ha anunciado un recorte de la inversión pública de más del 40%. La cantidad de sectores perjudicados por ese recorte sin precedentes va llevarnos un paso más allá de la crisis. La crisis ya ha tocado fondo; ahora empezaremos a escarbar. Dentro de un par de añitos, a todo estirar, la Grecia actual nos parecerá un paraíso en comparación con España. Yo, por si acaso, mantengo actualizado el pasaporte. Es muy posible que acabe usándolo, y no precisamente para hacer turismo.
¿A nadie más le da lástima esta mujer? Ha muerto por culpa de unas creencias fanáticas. Eso no es libre elección. O se las inculcaron férreamente, hasta el punto de condicionarla, o padecía algún tipo de alteración que le impedia entender que es mejor vivir que morir. Algunos comentarios que he leído por aquí, poco menos que celebrando la muerte de un ser humano (que, después de todo, no había hecho daño a nadie), producen náuseas.
Hay cosas y cosas. En teoría, la ITV tendría que responder a criterios objetivos. Máquinas homologadas que miden la frenada, la amortiguación, los humos... pero luego vienen las apreciaciones subjetivas. Lo que en una ITV es un goteo ocasional de aceite -falta leve- en otra es un goteo constante -falta grave-, con lo que te hacen volver a pasar por taquilla para no inmovilizarte el vehículo... además del coste de la reparación, claro, que a lo mejor ni siquiera es necesaria. Contra esas apreciaciones subjetivas, el usuario está vendido. Habría que exigir una carta de servicios clara, idéntica para todas las estaciones ITV de España, con los criterios objetivos que debe pasar un vehículo. Pero espérate sentado a que eso ocurra.
No sé muy bien cómo funciona el mecanismo de votos de Menéame. Parece que si escribes algo que no gusta al pensamiento dominante, te votan "negativo" o algo así, no importa si das o no argumentos. No sé si calificar esto de democrático, pero como comprenderán me importa un bledo. Sólo entro a leer noticias y a contrastar mis opiniones con otras. La realidad es que el coche eléctrico, éste o cualquier otro de este tipo, no está en condiciones hoy por hoy, ni previsiblemente en un futuro próximo, de sustituir al automóvil corriente: no proporciona autonomía, ni velocidad, ni hay posibilidad de que la red eléctrica alimente a un parque móvil equivalente al actual; las baterías son contaminantes y carísimas de reponer. A la vez, también estoy seguro de que el esfuerzo conjunto de físicos e ingenieros acabará por hacer viable algún tipo de vehículo eléctrico, pero no como los que conocemos, que son burdas imitaciones de los coches tradicionales, igual que los primeros automóviles eran carretas de caballos recicladas con humeantes y pestilentes motores. El futuro del coche eléctrico será algo diferente y revolucionario, tal vez algún tipo de vehículo sustentado por campos magnéticos, sin rozamiento contra el suelo y provisto de alguna clase de "pila" económica y eficaz que no se parecerá en nada a las baterías que conocemos. Wait and see.
#10 Si gastase 20 €/mes de gasofa, iría andando o en bicicleta. Es evidente que ese coste indicaría que no tendría que ir ni a la vuelta de la esquina.
Casi 15000 € (carísimo para este minúsculo vehículo), más alquiler de batería, más mantenimiento, más desgaste de piezas, con una ridícula autonomía de 200 kilómetros; y apuesto lo que quieran a que, con carga completa (cuatro personas), la autonomía será incluso menor que eso. Lamento de verdad decirlo, pero el coche eléctrico no es una alternativa real al motor de explosión. Tal vez algún día, pero no ahora. Es un juguete para niños ricos y poco más.
Impresionante. Desconocía que fuera imposible producir plasma de cobre en Málaga. Y eso que he visto 'Kárate a muerte en Torremolinos'. De lo que se entera uno.
#3 Lo de los petardos, lo suscribo. Ayer mismo un grupo de niños me echaron dentro del garaje un petardo que, por su potencia explosiva y nauseabundo olor, debía de contener uranio empobrecido. Aún me duelen los tímpanos. Y la culpa no la tenían los niños, no; la tenían los padres, que desde el casal, vestidos con el blusón y trasegando cervezas, contemplaban con benevolencia la 'kale borroka' desatada por los pequeños vándalos.