Puro darwinismo: Los hombres y mujeres que nacían sin barbilla eran repudiados por su aspecto bobalicón. Sólo procreaban con otro que sí tuviera realmente un bajo cociente intelectual. De ellos nacían hijos sin barbilla y de poca cabeza que votaban al PP o al PSOE, pasaron hambrunas, apenas se reprodujeron por falta de recursos y acabaron extinguiéndose siendo esclavos depresivos.
#2 Rosa siempre tendrá incondicionales, como por ejemplo los que adoran a las dominatrix maduritas y feorras. Ahhh, ahhh, soy tu siervo, así, AAhhhhggg... No Rosa, eso no, por favooor
He visto pelis que no creeríais: astronautas zombies superviolentos, huevos que eclosionan, jefes que mueren los primeros, tías buenas que de repente se convierten en arpías... Yo lanzaría el cadáver al sol antes de que empiece a mover el meñique...
#4 Pensándolo bien, un trasplante de pene en realidad se podría considerar un trasplante de cuerpo. Gran tema para sacar en el bar, en sustitución del fútbol
#3 Yo te doy la razón, en 20 años, con los avances tecnológicos que estamos viviendo, pensar que vamos a tener un sistema sanitario como el de Lima parece un error
#11 Opino lo mismo que tú. Quizá porque conozco algo esas culturas no me creo la "versión oficial" de los medios. La verdad es que por número de muertos producidos por Occidente versus Países Islámicos, ganamos a lo España-Malta. Nosotros sí que somos peligrosos
#9 que yo sepa se promueve la cultura y costumbres de los países de origen. Es que damos por hecho que cualquiera que tenga la religión musulmana es un extremista. Los medios se han dedicado a hacernos creer eso. Y ha cuajado muy bien, mucha gente lo ha creído. Si hicieran en Francia una campaña contra los españoles podrían hacer creer que somos idiotas corruptos (por votar al PPSOE), torturadores de animales, asesinos de mujeres, vagos, etc. Por otro lado, en América Latina y en África hay muchos colegios católicos que promueven doctrinas muy similares a las del Opus Dei. Te dejo un enlace sobre el chiismo: es.wikipedia.org/wiki/Chiismo (que conste que no defiendo las religiones, yo soy de los que ve la Vida de Brian en estas fechas)
Pero ¿acaso nos debería importar la vida privada de Pablo Iglesias?? Los periodistas son tan responsables como nosotros por hacer clic en estas noticias. Lo malo es que no he podido evitar ver las fotos... está buena...
#2 Podría ser, pero ¿tanto como el Amazonas? Quizá el periodista se haya liado un poco. No dice de donde obtiene esa afirmación tan categórica. Esto mismo me ocurre con mi mujer, que dice que yo dije algo que jamás habría dicho. Como explicaba Leo Maslíah:
El otro día por ejemplo mi mujer me dijo una cosa que no me gustó. Me dijo que yo le había dicho una cosa que yo jamás le diría, ni a ella ni a nadie. Porque yo lo que le había dicho era otra cosa, yo le había dicho “decime: qué fue lo que te dije, yo. ¿Me decís, lo que te dije?”. Y yo no me acordaba de lo que le había dicho, pero ella se pensó que yo se lo decía como reproche, y entonces me dijo “¡qué decís! ¡pero escucha un poco lo que estás diciendo!”. Entonces yo le dije “y qué te estoy diciendo, si no dije nada”. Y ella se quedó muda, sin decir nada. A lo que yo le dije “decime algo, por favor”. Ella siguió callada y yo le dije “no me digas que no vas a decir más nada”. Y ella no dijo que no fuera a decir más nada, pero tampoco dijo nada más. Y yo le pregunté “¿no decís nada?”. Y como no decía nada, le dije “qué te dije: te dije, que no ibas a decir nada”. Y ahí me dijo que no iba a decir más nada que lo que estaba diciendo en ese momento. Y yo, escéptico, le dije “no me digas”. Y ella me lo dijo de nuevo. Entonces yo le dije que ella, al decir de nuevo que no iba a decir nada, se estaba contradiciendo, y ella me dijo “por qué; qué dije”. Y yo le dije lo que ella había dicho, pero ella pensó que eso era algo que yo le estaba diciendo a ella, y me dijo cosas que a mí nadie puede decir. Yo, para asegurarme de lo que me había dicho, le dije “qué querés decir”. Y ella, con otras palabras, me dijo lo mismo. Y enseguida me dijo también “¿ves, ves como no me contradigo? Te dije lo mismo que te había dicho recién”. Y yo le dije “pero decime una cosa: ¿qué estás diciendo? Porque con eso no me decís nada”. “Entonces si ya sabés lo que te digo no me preguntes qué te dije”, me dijo ella. Y yo le dije que no me dijera eso. Ella me dijo que bueno, que me iba a decir otra cosa. Y entonces fue que me dijo algo que no me gustó. Pero yo no se lo dije. Me guardé de decirselo, por una cuestión de… no sé… cómo te puedo decir? Es que hay que cosas que no se dicen. Yo digo ¿no? Digo yo, no sé. Sé que hay un dicho, para decir esto, pero yo no lo sé decir. Qué querés que te diga.