La desgracia del asunto es que tras el "aviso" de Almunia se esconde la ideología que triunfa en la Unión Europea: más o menos, y resumiendo mucho, leña al mono, que si no no "produce". Por productividad, Almunia entiende beneficios empresariales y bancarios, así de claro; no sigáis dándole vueltas a la cosa. Y según los aires tan elevados que el señor Almunia respira por Europa (Solbes lo pasa por la izquierda, ¡agárrate!), los trabajadores españoles estamos ganando demasiada pasta, para los beneficios empresariales que producimos. Resulta cabreante, e insultante, que nos traten así.
Todos los comentarios que habéis hecho referidos a la situación socioeconómica de Almunia no son baladíes... Su inconsciente vida muelle le hace decir estas cosas. "Si es que son unos vagos, amigo Peláez", dirá al que le pasa las comisiones ilegales, sentadito en su sillón de piel del Parlamento Europeo, mientras admira displicente el color del coñac de una copa de cristal de Bohemia. "Si se acomodan, no rinden, no rinden."