#23, #31, #24 #9 A lo mejor a las niñas les interesa menos el ajedrez
Yo creo que es eso. Es un juego lógico-matemático, absolutamente crudo, con CERO importancia de la psicología o biología de los seres vivos. Ni siquiera es un juego de estrategia. Si quisieras ser un estratega como Rommel, tendrías que conocer a tus hombres y saber cuándo una unidad está a punto de agotarse y cambiar de sitio. Eso en el ajedrez no computa. Si como Rommel, bebieras lo mismo que tus hombres, media taza de agua al día, para subirles la moral, eso tampoco cuenta. Si te importara más desarrollar a todos los peones como dama, llevarlos a su máximo potencial, el juego no lo permite. Si de base te parece fatal que el rey y la reina valgan más que todos los demás, no es cambiable... Es un juego que demuestra tremenda capacidad espacial y lógico-matemática, pero... ¿Qué haces luego con eso? Entiendo que haya en concreto pocas mujeres brillantes en ajedrez, porque las mujeres brillantes de capacidad muy elevada (que en número suelen ser menos que los hombres), están en biología, medicina (Jane Goodall, Rosalind Franklin) o si acaso física. Pero... ¿ajedrez? No creo que haya muchas. Y no creo que deba haber campeonato femenino. Me parece insultante. Porque veo perfectamente normal que haya pocas mujeres que juegan al ajedrez. Es que ves el juego y piensas... ¿qué hago yo con esto? ¿Qué aprendo de esto?
Aunque haya mujeres brillantes, entiendo que salvo Judit Polgar y otras cuantas, la mayoría no estén interesadas en dedicar horas y horas de su vida a este juego. ¿Descubres la radioactividad? Estupendo, algo haremos con eso. ¿Sacas foto al ADN? Muy bien, esto mejorará la medicina. ¿Te pasas la vida observando mamíferos? Genial, aprendemos de la vida y del ser humano. ¿Te pasas la vida jugando al ajedrez? Me parece genial también, seguro que mejoras muchísimo tus capacidades espacial y lógico-matemática, pero espero que te diviertas, porque no le veo la punta más allá de eso.
#34: intereses personales
Yo creo que la mayoría es esto.
#5 La estadística no dice nada ni remotamente parecido ni apoya esa tesis. De hecho, el artículo hace un manejo de los números verdaderamente lamentable, infinitamente lejos de lo que debería ser un análisis matemático. Para empezar se queda en la cifra del porcentaje de mujeres mayores de 35 años, cuando es una edad elevada para la práctica del ajedrez. Del top ten de ajedrecistas 7 tienen a día de hoy edades menores a los 35 años, y desde luego, ya estaban en el top 100 todos ellos a los veintipocos (o antes).
Según el propio artículo entre el 11 y 12% de los ajedrecistas son mujeres dentro de la franja de edad entre los 15-35 años (si no eres top 100 en esa franja, es difícil que lo seas en un futuro), sin embargo, solo tenemos un 1% de mujeres en la élite. Que el artículo diga que las "estadísticas no engañan" parece de chiste, porque evidentemente, es el articulista el que lo hace.
Habla del programa de entrenamiento chino, y dice no conocer las cifras, pero quien siga el ajedrez sabe que ese programa se centraba precisamente en las mujeres porque consideraban que sería más fácil optar a un top 1 en categoría femenina que en la absoluta. Recuerdo hablar de este programa a Leontxo García cuando hacía el "Ágora", y precisamente, Hou Yifan ya era una figura mundial a sus 14-15 años y un emblema de dicho programa de entrenamiento.
Seguramente, dar una respuesta a por qué existe una diferencia tan grande en el porcentaje de hombres y mujeres es un tema muy complejo, y además de la inteligencia deberían incluir cuestiones como: competitividad, determinación, intereses personales, obsesión (algunos trastornos del espectro autista pueden ayudar), agresividad, y por último, el físico también importa (aunque menos que en otros deportes). Digo esto porque se sabe que a partir de la adolescencia es cuando los niveles relativos hombres-mujeres se desigualan en favor de los hombres.
Menudo rollo que te acabo de soltar, perdón, pero el artículo es un disparate.