#3 como anécdota curiosa, una vez se me inundó el piso porque la lavadora se puso a escupir agua y, cuando llamé al vecino para pedirle más fresgonas y cubos me recibió un tipo rapado con un tatuaje de esvástica, el tipo se puso a ayudarme a recoger agua con su mujer y yo, en forma de agradecimiento, le hice una tarta de queso que me salen muy ricas. Le gustó tanto que me encargó una para el cumple de un amigo suyo, y esa es la historia de como acabe en un cumpleaños nazi con una tarta de queso, melenaca y maldiciendo mi civismo