No voy hablar sobre la manifestación, ni a tratar de opacar la situación tan angustiante que tuvieron que vivir las personas que estaban allí en ese momento. Quiero resaltar la valentía de un joven de 16 años que arriesgó su vida por salvar la vida de una niña inocente víctima de una situación ajena a ella. Lo felicito porque pudo hacer lo que nadie más hizo y es en este momento es un héroe.
Creo que fue una buena decisión. Es una forma de enseñarles a sus estudiantes que todos merecen respeto y que las redes sociales deberían de usarse de una forma más sana. A ellas recurren infinidad de personas que desean vincularse de una u otra forma con otros seres humanos por diferentes motivos y da tristeza ver la forma como muchos las emplean para destruir a los demás. No se nos puede olvidar que lo que decimos ya sea verbal o escrito refleja la clase de persona que somos.