Sólo quise compartir dos de mis artículos ahora sólo espero que a alguien le gusten, sino pues para eso tenemos el derecho de opinar sobre lo que no nos gusta, ¿no? Un saludo
A ver si no lo intentan colar como MB, cuando en verdad se trata de Mb... Odio ver en los anuncios eso de "MEGAS"... MEGAS qué, majos? Se aprovechan de que no somos expertos para meterla doblada, pero bueno, no quiero salirme del tema. Son buenas noticias, espero que no nos estafen (más).
#6 no soy una experta (ni de lejos) en código fuente, pero hace un par de meses salió una encuesta sobre la valoración de los usuarios sobre sus teléfonos táctiles, y sólo una minoría querrá repetir la experiencia: la mayoría de esa minoría, poseedores de un iPhone. El resto de móviles da muchos fallos, van lentos... Son como los móviles "normales" pero con una pantalla táctil, que encima da problemas y para colmo encarece el producto.
No obstante, como digo, mi comentario es sólo una opinión, puedo tener razón o no.
#2 Aunque respeto tu opinión en absoluto estoy de acuerdo. No sé si abrás tenido la oportunidad de usar (que no probar) un iPhone durante un par de semanas, pero lo que hace al iPhone la revolución que es, no es sólo el hardware y el superior software (aún sin superar) sino las "infraestructuras" al rededor de
éste. Las facilidades que supone, los servicios preparados sólo para él... Sobretodo el tema de la AppStore: miles de aplicaciones punteras de distintos desarrolladores al servicio de las más imaginativas necesidades. Eso ya está en marcha y crece a una velocidad vertiginosa, por lo que quien yo creo que llega tarde, es Android, Nexus y los demás, que aunque empiezan a crear estas infraestructuras, aún les clara mucho para consolidarlas y aún más para hacerlo a la dimensión a la que Apple ha llegado, si es que llega.
No obstante, como a estas alturas habréis deducido, yo tengo uno y raro sería que lo tuviera sin pensar que es el mejor... Así que tomadlo sólo como la opinión de una iPhonera
Quizá sea demasiado optimista, pero ojalá esto marque el principio del fin. Que la Unión Europea dé un buen tiró de orejas al Gobierno y la Ministra deje de venderse a cambio de dejar carta blanca a la SGAE. Como músico, yo y otros muchos, estamos hartos de esta situación.