Como muchos medios comentan, la afección que padecía Antonio Puerta era displasia ventricular derecha arritmógena (ARVD). En las personas que tienen esta enfermedad el músculo del ventrículo derecho es sustituido por tejido adiposo (grasa), que impide una correcta conducción de la corriente eléctrica, lo que provoca arritmias y taquicardias. Es una afección muy difícil de detectar, pero no imposible. Normalmente se diagnóstica mediante una IRM (Resonancia magnética) de alta velocidad, pero esta prueba diagnóstica no se realiza arbitrariamente, sino que deben existir algunos síntomas como taquicardias, dolor, mareos o dificultad respiratoria.