A este le odiamos en Alcalá de Henares desde antes de que odiarle fuera mainstream.
Fue el director de El Diario de Alcalá, nombrado por su hermano Julio Naranjo, otro cuñado, que era el que ponía el capital. Meritocracia. El Diario de Alcalá duró lo que duró su modelo de negocio, la publicidad institucional. Y de ahí se fueron, sin antes dejar un pufo de un millón de euros con hacienda y un año de nóminas sin pagar a sus empleados.
Glorioso fue un artículo suyo defendiendo a Esperanza Aguirre tras atropellar a un agente de movilidad. Porque lo importante no es lo que se hace sino quien lo hace.
#6 Pregunta honesta de un aficionado al deporte más allá del fútbol, ¿hay algún medio deportivo en español que no sea periodismo de bufanda? ¿Alguien que informe más allá del Real Madrid y el FC Barcelona?
#11 Estando de acuerdo, solo matizar que no es una versión del director, ya que Fincher ha rechazado participar en nada relacionado con Alien 3, sino una versión extendida hecha por uno de los productores.
#9 Es lo que tiene hacer de la educación un negocio. En la universidad estatal de donde vivo, que aunque sea pública hay que pagarla, a los profesores ya les han dicho que bajen el nivel, que si son muy exigentes con los estudiantes, se van a otras universidades más fáciles y la uni deja de ganar dinero.
#24 Llevo diecisiete años de profe en Estados Unidos y doy fe. De hecho el estereotipo se quede corto. La pregunta que nos hacemos los extranjeros que llevamos tiempo en este país siempre es la misma: ¿Cómo pueden ser la primera potencia mundial con los inútiles que son?
Recuerdo a un profesor de historia escocés que estaba hasta las pelotas de ese empuje de la historiografía escandinava que presentaba a los vikingos como pacíficos granjeros migrantes, que era una manera de limpiar su historia, y que no, que por donde los vikingos pasaron por Escocia pasaron a cuchillo.
#80No se ven negros ni paletos en los conciertos de USA
Tú no vives en EEUU, ¿no? ¿Quién crees qué va a los conciertos de Doja Cat o Brad Paisley?
A ver, escuchar en una fiesta de una fraternidad canciones de The Offspring es como escuchar en el hilo musical de centro comercial "Torn" de Natalie Imbruglia, lo normal y esperable.
Quizá en un principio fueran muy punkis y underground pero, a principio de los 2000, la imagen de The Offspring estaba asociada a fiestas de universitarios, blancos, acomodados.
Y no creo que haya ningún estudio sobre la incidencia de artistas o géneros musicales en la comunidad blanca universitaria de Estados Unidos, lo siento, no creo que sea un tema que llame mucho la atención a la comunidad académica.
#14 A mí, que vivo en EEUU, me toca mucho los cojones que la chavala que te está quitando los platos casi antes de que termines, en el momento de traer la cuenta, empieza con el "small talk"; que de dónde sois, que me encanta vuestro acento, y cosas así, sólo para intentar dejar una buena impresión para que tener más propina.
Las maravillas de los seguros americanos, con sus in-network, out-network, franquicias, copagos... La seguridad que da ir al médico sin saber si la factura que te llegará será de $50 o $200.
Yo, por unos módicos $700 mensuales (más los 1200 que paga mi empleador) disfruto de un seguro familiar con solo $1000 de franquicia por asegurado, y después de eso solo tengo que pagar el 20%.
Dentro de poco en Madrid, Cataluña, y de ahí a toda España
#6 Yo igual. Era ruido de fondo, si algo te llamaba la atención lo veías, pero si no, pasabas de la tele completamente. Tampoco es que tuvieramos muchos canales donde elegir.
A ver, este puente, aún viejo y obsoleto, se ha caído por lo que le ha pasado, pero eso no quita que está gente tenga infraestructuras de mierda: no hay tren de pasajeros y la red de mercancías provoca descarrilamientos cada dos por tres, la red de tuberías con plomo en algunas ciudades, los aeropuertos ochenteros con alguna excepción, los agujeros en las carreteras por no usan alquitrán, el transporte público con sus autobuses con cuernitos…
Cualquiera que haya venido a este país y haya salido de la costa este se ha dado cuenta de que ahora mismo tenemos mejor infraestructura. Este país necesita un nuevo New Deal, pero mientras la economía siga como un tiro no va a pasar.
Fue el director de El Diario de Alcalá, nombrado por su hermano Julio Naranjo, otro cuñado, que era el que ponía el capital. Meritocracia. El Diario de Alcalá duró lo que duró su modelo de negocio, la publicidad institucional. Y de ahí se fueron, sin antes dejar un pufo de un millón de euros con hacienda y un año de nóminas sin pagar a sus empleados.
Glorioso fue un artículo suyo defendiendo a Esperanza Aguirre tras atropellar a un agente de movilidad. Porque lo importante no es lo que se hace sino quien lo hace.