Como las bombas que tiraron los cazas españoles estaban autorizadas por el gobierno socialista de Zapatero y su ministra de guerra Chacón, los del "No a la guerra" se quedaron en casa apoyando la destrucción del Estado Libio.
Estado que hoy ya no existe. Estado expoliado, donde las finanzas internacionales se quedaron con 100.000 millones de euros de los libios que tenían como reserva monetaria. Estado que bajo el Gadafi era el más próspero del Norte de África. Estado que quería salirse de la estafa del petrodolar y que fue detruído por ello.
Lo que hicieron los socialistas con Libia autorizando el ataque es igual que lo que hizo Aznar autorizando el apoyo a la guerra de Irak.
Los españoles, por culpa de nuestro gobiernos y de los ciudadanos bastardos que los han apoyado, tenemos una deuda con los pueblos iraquíes y libios que jamás podremos pagar.
Ninguno de esos me convence, pero los prefiero a la imposición del felipito. Al menos así tendré la esperanza de poder hacer que un día, gobierne ZP (por trolear)