Ojalá hubiera sindicatos tan luchadores como CGT en cada centro de trabajo, dan la cara y no actuan como un simple intermediario entre el trabajador y el abogado (para eso otros). Por experiencia, si necesitas ayuda, se hace una piña y "todos a una". Independientemente de que esté de acuerdo con el tema de renunciar a la miseria de las subvenciones, me parece la opción mas coherente para la pelea diaria de la supervivencia en el mundo del explotador.
A mi entender el problema no es Ada Colau, ni Guanyem, ni Podemos. El problema son los otros dos socios de gobierno ICV y EUiA que ya han tenido su cuota de poder en las instituciones municipales y tienen metida a dedo a mucha gente en sitios como TMB, la Diputación de Barcelona, Barcelona Serveis Municipals, etc... y estos son los que creo están intentando tapar todo eso que CGT les exige que salga a la luz.
Yo ya comenté en su día que era un error enorme aliarse con esos dos y ahora empiezan a pagarlo.
#26 La muestra la tienes en que la Presidenta de TMB es de EUiA ¿Por que no enseña los sueldos y funciones de esos directivos?
Hace poco también leí en un blog un texto de un grupo de gente de ccoo de base que estaban muy descontentos, por decirlo suavemente, de cómo funcionaba su organización. A nivel estatal están perdiendo mucha afiliación, los más combativos se van, los amantes de pactar con la patronal y gobierno se quedan. También veo una evolución en el sector de la informática en la que CGT está ganando muchas posiciones. Me alegra el cambio porque, los que conozco que trabajan en cárnicas, son unos luchadores incansables.
#0 Hasta entre los sindicalistas, "El Miedo está cambiando de lado".
Espero que siga así y los trabajadores afiliados a CCOO y a UGT, reconozcan para que les sirve pagar sus cuotas a estos sindicatos.
Un cambio a CNT o a CGT, siempre será un cambio POSITIVO.
Por un Euro, nombre de la jueza que metió a Laura Gómez 22 días de prisión preventiva por 'riesgo de fuga' (petición inicial policial de 36 años de cárcel por hacer una performance con una caja de cartón frente a la bolsa de barcelona).
Tic, tac,tic, tac: Carmen García Martínez la misma que instruyó el #4F.
Pues a mí me ha gustado mucho. Y sobre todo hay que tener en cuenta que en otras televisiones, periódicos y radios afines al poder no se difunden ni analizan estas realidades.
¿Qué importa? Sólo son decenas de miles de obreros que se han dejado la piel en las fábricas.
Sólo falta que el estado se acabe de mear en la petición de CGT para dejar claro lo que le importamos a esta gentuza.
Sería aun mejor noticia que cualquier sindicato recibiera apoyo y, además, la implicación de los trabajadores. Igual que con los partidos, no es suficiente con votar a un sindicato. Hay que participar, proponer y actuar. Si sólo se delega, se pierde el poder.