En la Alemania de la Republica de Weimar la clase obrera acabó votando a Hitler.Entonces el judío era el culpable. Hoy el inmigrante es el culpable del deterioro social mientras las élites son cada vez más ricas. La estrategia del chivo expiatorio les sigue funcionando hoy más que nunca con un control absoluto de la propaganda.
Su perdiesen el control del poder judicial aún les quedaría la tropa que va a rezar a Ferraz, los medios, la policía, los empresarios y el ejército para ¡PUTODEFENDER ESPAÑA!
Los jueces la absolverán de cualquier delito y los obispos su conciencia.
Una de los nuestros.
La política española es la continuación del fascismo en democracia plena.