#1#6#7 esta noticia se puede compartir en Twitter o sea que deberías denunciarlo a menéame y salirte para no contribuir a la apropiación de tus comentarios por parte de Twitter (de donde vengo por cierto).
Creo que sus aires de salvador le están haciendo poner su ego delante de su profesionalidad. ¿Y como podemos saber que no está haciendo todo este numerito para salir en todas las fotos y que los medios le hagan la campaña electoral? Y si fuera así ¿Que credibilidad política tiene un tipo que pide 250.000€ para su campaña electoral y no dice en que se los va a gastar, o que no sabe decir como le han elegido candidato? www.meneame.net/story/juez-silva-apoyan-cientos-cientos-asociaciones-p
Que pesadilla, toda la semana santa van a estar con esta cuestión los medios catalanes, dándole voz a un consejo que no deja de ser otro aparato de propaganda que se han inventado para seguir con este teatro, y que a la vez les va permitir seguir culpando a Madrid (y no a gobernantes corruptos). Espero que algun día se den cuenta de eso de los de abajo y los de arriba, porque en Catalunya se han olvidado por completo.
Federar competencias frente la totalización de la unidad. Que mejor que las alianzas que respetan a cada proceso singular? Dando ejemplo con el hacer y no con el decir como se tienen que hacer las cosas.
Rato solo es el primero de la lista, pero espero que poco a poco vayan pasando por el banco de los acusados y por caja, a devolver todo lo robado. Genial este Ratoleaks!
#7 La verdad es que, decir que no cambia nada una revuelta que marca un punto de inflexión en las formas de hacer la política, es un poco arriesgado. El mayo del 68 abre el escenario político de posibilidades en la que nos encontramos hoy, abre la diferencia y la singularidad del sujeto-multitud que se rebela frente la homogeneidad del obrero-massa, abre multiples campos de batalla como los que vivimos hoy: derechos digitales, derechos de circulación de las personas, el derecho a la vivienda digna,...
Creo que en este contexto y como consecución del mayo del 68 és posible imaginar nuevos espacios de lucha, y aunque por desgracia aun arrastramos cierto temor colectivo a la revuleta, en parte, fruto de 40 años represión sobre los cuerpos que hemos recibido como herencia, y así lo estamos empezando a ver en Londres, Paris, Roma, Grecia, o aquí mismo con la cuestión de la leysinde, movimentos de hipotecados, luchas de colectivos migrantes, el movimiento por la vivienda digna, o los estudiantes delante los recortes. Solo és cuestión de tiempo, de cabreo, y de cierta acumulación de fuerzas y de posibilidades para que volvamos a tener un poco de agitación con su respectiva traducción a nuevos derechos, nuevas emergencias y nuevas formas de vivir y hacer la política desde todxs y para todxs.