#25 Gracias por la explicación. Me olía que podía ser algo así, pero la verdad es que sorprende que a día de hoy pase algo así de manera "no puntual" en un teatro que se supone profesional.
#19 ver a estos 2 pasando vergüenza durante una hora, sufriendo por mantener el momento mientras sucedían los problemas técnicos... Que suerte poder verlo, pero mejor que suerte poder vivirlo en directo!!!
Cracks!!! Son unos cracks!!!
Y lo mejor... No echar la culpa a Alfonso!!! Con lo fácil que lo tenían, un simple chascarrillo na'más.
Es que claro, como es punk, puesss... No sé, habría que estar en su puta cabeza. Supongo que este pobre gilipollas cree que ser antisistema consiste en esto.
#21#18 Mis etapas al consumir LSD han sido siempre similares:
1: Tío, esto está tardando en subir no?
2: Pa mí que nos han timado tío, jaja, nos han vendido un papel
3: Esta mierda no sé yo jajaja, pa mí que vamos a tener que buscar otra cosa jajaja
4: jajaja, creo que está empezando a subir no? jajajaj. No estoy seguro jajaja. igual hay suerte jajajaja!
5: jajajajajaja Mira la cara que tiene ese! jajajajajajaja A dónde íbamos? jajajajajajaja Parece que al final sí que ha subido, no? jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja...
Los monguis, sin embargo, sólo me producían como una especie de borrachera casi instantánea.
Lo más alucinógeno que he probado es el dextrametorfano, consumido a través del jarabe para la tos Romilar. Recuerdo que al pensar en alguna persona, lugar o situación, aparecía en mi mente a tamaño natural, con un realismo increíble, tanto en forma como en emociones, con detalles de los que tenías total desconocimiento, y sintiendo casi como si estuviera al lado mía; Como si mis pensamientos pudiesen visualizarse más allá de mi cabeza, abarcando toda la habitación.
Cuando llegaba a casa, era común quedarme tumbado varias horas en la cama con los ojos abiertos, disfrutando de esa profunda y detallada capacidad de recordar, y sintiendo casi como si estuviera viajando instantáneamente a donde me apeteciera.
Lo malo eran las molestias estomacales, y el olvidarte de cómo se anda...